Mientras el Departamento de Estado lo involucra con el crimen de 1976, Posada Carriles desayuna en el Versalles

Luis Posada Carriles en el restaurante Versalles, de Miami. Foto: Semanario Libre

Mientras el Departamento de Estado desclasificaba sin censura su informe de 1976, en el que apunta hacia Luis Posada Carriles como autor intelectual de la voladura de un avión civil cubano con 73 personas a bordo, el terrorista asistía a un desayuno de trabajo en el restaurante Versalles, de la Calle 8 de Miami (Estados Unidos).
Como dan cuenta las imágenes publicadas por un “periódico” digital de los extremistas locales, al encuentro también asistía el “disidente” Jorge Luis García Pérez Antúnez, quien “advirtió tajantemente que no se ‘va a permitir más afrentas contra el sagrado exilio cubano de Miami”, y denunció los “supuestos procastristas que están radicados y camuflados en Miami”.
No hay declaraciones de Posada Carriles en la crónica social de este “desayuno de trabajo” en Versalles, pero a juzgar por el tono de las amenazas de Antúnez -el mismo que se apareció en la Cumbre de Panamá con el asesino del Che, Félix Rodríguez-, la reunión no era solo para degustar el café con leche.
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